jueves, 3 de mayo de 2012

EL HOMBRE DIVIDIDO


                     Hay días que sobre todo tras meditar , serenos ; otras veces  en distintas situaciones en las que nos encontramos muy tranquilos,  sin muchos deseos; podemos tener la sensación de que estamos en el sitio correcto. Qué hacemos lo que tenemos que hacer , vivimos como tenemos que vivir y en esos momentos aunque nos cayese un rayo encima todo estaría en paz y podríamos desaparecer apaciblemente....
                     Pero en cambio , otros muchos dias tenemos la sensación de que el destino , la vida , tiene para nosotros un plan que no estamos cumpliendo.  Es decir estamos divididos o desituados.
                      Nuestro yo ideal se encuentra en otra parte, lugar maravilloso que no logramos vislumbrar. El sitio del " si hubiera hecho , o si hiciera eso o aquello...." " si viviese de tal o cual  forma ...".Paraiso de plenitud.  Mientras nosotros,  seguimos nuestra cutre existencia aquí . 

                     Posiblemente sintáis vosotros también alguna vez lo mismo. Cuando" parece el Universo olvidarse de nosotros" y depararnos una vida que no es la que deberíamos tener. Pensamos o sentimos qué nos faltan muchas cosas por hacer por vivir, por cumplir.
                     En esos momentos la posibilidad de ese rayo sobre nuestra cabeza, la posible muerte en cualquier momento sería solo LA GRAN PUTADA. Sólo el hecho de imaginarlo nos crea tal angustia por lo inacabado , por lo no vivido , lo no sentido; por habernos perdido la otra vida, la ideal que tendriamos que llevar, la  que imaginamos con todos esos posibles...que apenas podemos respirar...
                    Cuando nos recobramos de la angustia soñamos con que nuestra simple vida vuelva a ser nuestro destino. Volver a sentir el aquí y el ahora ; la tierra bajo los pies. El hecho de aceptar.
EL TODO ESTÁ BIEN COMO ES.

.

                       ¿ Donde radica entonces esa diferencia. ? Por supuesto es algo cerebral,  mental , neurotransmisores en movimiento ...Pero, tal vez podamos ayudarlo, y tal vez sólo intentando cualquier practica que nos lleve al momento presente. Tal vez nos ayude no complicarnos la vida más de lo imprescindible , tener pocos deseos.
                        De esa forma posiblemente podamos encontrarnos en mas instantes de " eternidad ", más días de la maravillosa sensación de" TODO ES COMO DEBE SER."
                      Pero parezco olvidar lo más importante, en estas sensaciones de total paz  no nos sentimos solos.
                      Unicamente  cuando el Universo y yo somos uno , segun el Zen ( no somos dos)
ya no existe ni siquiera un plan..    Todo lo que  evite la sensación  de independencia, de soledad , todo lo que nos haga resonar con los demás nos llevará inevitablemente  a   NO TENER MIEDO.


2 comentarios:

  1. Tu entrada Antonio,me hace reflexionar profundamente sobre nuestra división y separación de la "fuente", del "espíritu" o como lo queramos llamar, de ese estado de aceptación y sí a todo tal y como es.

    Si todo lo que existe es perfecto y es creado por la fuerza que todo lo mueve, supongo que también este estado de insatisfacción por nuestras imágenes internas de lo que queremos o esperamos, nuestro ego, también estará al servicio.

    Descubriendo y honrando su papel, amoroso e inclusivo, seguro que nos lleva más lejos de nuestras limitaciones.

    Tengo pensado en breve hacer una entrada en el blog con una reflexión sobre esto.

    Gracias Antonio por tu estimulante reflexión.

    ResponderEliminar
  2. Ya sabes que no todo lo que escribes lo entiendo. Pero esta entrada la comparto toda. Está como escrita desde mi interior. Creo que está escrita desde el interior de todos. Lo has
    descrito para que sea fácil de entender. El tener miedo o no a la muerte es una sensación muy cambiante en mí. Y la causa debe ser lo que tú describes. Lo principal es aprender a vivir aceptándonos a nosotros mismos. Sin eso no hay vida.

    ResponderEliminar