DEVOLVER EL DAÑO

                          Cuando dos niños juegan y uno de ellos le quita algo a otro o le empuja, el segundo le da una patada al primero o un bofeton. El primero llora , ve que si hace otra , se llevará una segunda.....Al rato están jugando juntos como si nada. Saben como son y conocen sus limites, donde se la encuentran,,,.
                        Con los mayores todo se hace complicado. Nos sentimos culpables rápidamente si sólo se nos pasa por la imaginación devolver un daño. Tenemos cientos de formas se derivar la rabia,  de disimularla o tal vez de guardarla en un cajón esperando una ocasión más propicia....Nos sentimos el centro del mundo , dueños de la objetividad pura al calificar de bueno o malo o razón y sinrazón.
                         Estamos acostumbrados a evitar los sentimientos primarios y hacemos de todo una dramatización mental bastante peligrosa a la larga...O tal vez hagamos cosas extrañas como poner la otra mejilla...ante una bofetada sintiendonos cuasidioses , superiores siempre a nuestro oponente..incluso nos consideramos con el derecho a perdonar ..Aunque esto nos haga crear en el otro una deuda imposible de pagar , y que le lleve finalmente al alejamiento definitivo o a devolvernosla en forma de rencor soterrado y futuro daño más grave que el anterior...
                         .Este fin de semana nos comentaron otra forma más simple de devolver un daño . Sobre todo estas pequeñas heridas que nos inflingen tantas veces a lo largo del día..Primero reconocer mentalmente ante el otro: Me has hecho daño. , segundo sentir toda  la rabia y devolverla mentalmente al otro, tercero reconocer trás ello, que él y yo somos iguales, de esta forma no existen superiores , la energía se equilibra. La cantidad energética de daño recibido es igual al lanzado, no nos queda parte guardada en el cajón y lo más importante notaréis que inmediatamente algo cambia en el otro ....Así  tal vez aparezca algo que inmediatamente reprimimos ; el dolor. Sí, ese es el primer sentimiento primario que reprimimos y que se oculta dentro de la rabia, su duración es pequeña.
                         No hay que huir de la culpa que aparece por expresar mentalmente la rabia, la mala leche .el daño hacia el otro. A veces debemos evitar la buena conciencia.. Madurar es poder convivir con la culpa que produce tener algo de mala conciencia por ir más allá de los valores que nos impiden ser libres.....